Ahora que has llegado a la menopausia, ¿te preocupa cómo afectará a tu cabello? Acá te contaremos todas las verdades y expondremos los mitos que circulan sobre el cuidado capilar.
El pelo se debilita con la menopausia: VERDADERO
Algunas mujeres notan que hay un cambio en la fuerza y grosor de su pelo cuando llegan a los 50. La menopausia repercute directamente en los niveles de andrógenos, generando un impacto en la consistencia y ciclo de crecimiento de cada fibra capilar. El desbalance hormonal y cambios en la rutina de vida obliga a que prestemos mayor atención a nuestro pelo.
Los cambios hormonales son sinónimos de debilitamiento capilar: PARCIALMENTE VERDADERO
Si bien son varias las mujeres que presentan cambios visibles al instante en que alcanzan la etapa menopáusica, no por eso creas que es algo 100% un sinónimo de debilidad capilar. Sí es cierto que los desfasajes hormonales inciden directamente sobre cada folículo respecto a su diámetro. Sin embargo, si logras equilibrar tu dieta y estilo de vida puedes tener bajo control este desfasaje. Asegurate de ingerir suficiente proteína- responsable de la producción de keratina- y de hierro, que ayuda con la circulación sanguínea.
En esta etapa tan particular de la vida, la mujer suele presentar mayor sensación de fatiga y con poca energía, por lo que intensificar la actividad física y realizar ejercicio regularmente puede revertir esta condición.
La menopausia hace que el cabello se caiga: FALSO
En algunos casos puede ocurrir esto pero no significa que es algo que pasa indefectiblemente. La calidad y grosor cambia pero esto no necesariamente se traduce a la caída del pelo. Por otra parte, la fatiga y el estrés son grandes causas de la pérdida de cabello, y eso puede ocurrir en cualquier etapa de nuestras vidas. Si notas que estás experimentando una caída demasiado acentuada, visitá al médico para que revise un desorden en la glándula tiroidea y otros posibles desajustes hormonales.