Los calores y sofocos, también conocidos como bochornos, con síntomas característicos de la menopausia. La Da. Laura Mijelshon, médica dermatóloga, explica por qué se producen y como sobrellevarlos.
La sensación de calor aparece en momentos inesperados, ten especial del pecho hacia arriba, te hace transpirar, ponerte nerviosa y hasta por momentos respirar con dificultad. Sin embargo, a los que te rodean no les ocurre lo mismo.
¿Qué podemos hacer para controlarlos?. ¿Es posible?. Queremos ayudarte.
¿Por qué ocurre la menopausia y cuáles son sus síntomas? ¿Cómo impacta ésto en tu piel?
La menopausia es una etapa fisiológica normal de la vida de las mujeres. Está relacionada con el descenso del nivel de las hormonas femeninas: los estrógenos. Estas hormonas cumplen diversas funciones en el cuerpo de la mujer. Entre ellas, la regulación de la temperatura corporal y de los vasos sanguíneos.
La mujer puede sentir un aumento en la frecuencia cardíaca, tu corazón late más rápido. Si el calor aparece de pronto y sube rápido hacia la nuca y la cabeza, se pueden percibir escalofríos, debido al cambio rápido de temperatura corporal. Hay diferencias personales entre las mujeres.
Algunas tienen muchos episodios diarios de calores y sofocos y otras tienen pocos o no los perciben.
Es común que aparezcan sudores nocturnos, que te despierten del sueño, con frecuencia acompañados por insomnio.
¿Qué relación tienen estos síntomas con tu piel?
Los cambios bruscos de temperatura. El mal dormir, el insomnio y el estrés que producen estos síntomas, pueden alterar el equilibrio hidrolipídico de la piel.
Dicha alteración afecta la función barrera de la piel que, normalmente, nos defiende de las agresiones externas e impide la
deshidratación.
El manto hidrolipídico, que es la mezcla de moléculas de grasa y de agua en la superficie cutánea, mantienen la hidratación, la nutrición y el equilibrio de nuestra piel. Cuando esta barrera se altera, sufrimos cambios negativos tales como sequedad, descamación, enrojecimiento, cutis opaco y sensible.
Consejos para disminuir y prevenir los calores y mejorar los síntomas
- Cuida mucho tu piel antes de ir a dormir aplicando los productos específicos para esta etapa de la vida.
- Deja de fumar
- Baja de peso si es necesario
- Reduce el consumo de infusiones como té, café y mate, en especial muy calientes
- Trata de no consumir bebidas alcohólicas, ya que aumentan la temperatura del cuerpo
- Mantener ventilada y fresca la habitación
- Vestir ropa de telas livianas, como algodón o seda y evitar los cuellos cerrados
- Tomar duchas frías o tibias, no calientes