Bien nutrido es mucho más que estar bien alimentado.
Con los alimentos vamos a nutrir a nuestro cuerpo. Y hacer cosas que nos llenan de Alegría es el combustible del Alma.
La Enfermedad no es sólo la ausencia de salud. La organización mundial de la salud (OMS) define a la Salud como al bienestar
completo: tanto físico, como mental y emocional.
Nuestra alimentación debe ser armónica, de calidad, suficiente, completa, y adaptada a nuestras necesidades. No existe un alimento
que cumpla con todos esos requisitos (salvo la leche materna para nuestros primeros meses de vida). Después vamos a tener que comer
de todo. Y variado.
Para poder lograr estar Sanos tiene que haber un equilibrio. Es decir, un balance entre lo que ‘entra’ y lo que ‘sale’ de nuestro cuerpo.
Si gastamos mucha energía y no la reponemos, estaremos más débiles, propensos a enfermarnos y hasta de caer en adicciones…
Para evitar esto, es importante saber cuáles son las cosas que nos ‘sacan’ la energía:
• Pensar y pensar si parar;
• Estar con personas que viven quejándose y sólo ven lo negativo de
las cosas;
• Hablar y criticar todo el tiempo;
• Una mala alimentación llena de toxinas, ya que le quita al cuerpo
energía para neutralizarla, al igual que fumar y tomar mucho alcohol.
Por otro lado, es importante saber cuáles son las cosas que nos ‘llenan’ de energía. Una de ellas es alimentarnos bien, dándole al cuerpo todos los nutrientes que necesita. Esto incluye los cuatro grupos básicos, que
son:
1) Frutas y Verduras: aportan 90% de agua, vitaminas, antioxidantes minerales y fibra; por ello conocidos con como “súper alimentos”.
2) Cereales integrales y derivados arroz integral, quinoa, trigo sarraceno y burgol, pastas y panes, si son “integrales” mejor ya que contienen más nutrientes: aportan vitaminas del complejo B e hidratos de carbono complejos con fibra.
3) Carnes (vacuna, aves, pescado): si uno quiere ser vegetariano pueden también reemplazarse por legumbres (lentejas, garbanzos, porotos, soja) y huevo. Aportan hierro, vitaminas y proteínas.
4) Lácteos (leche, yogurt, quesos): proveen calcio y proteínas. También pueden reemplazarlos por semillas y leches vegetales si son
vegetarianos.
Pero no sólo la comida nos da energía. Estar al aire libre, descansar, dormir bien, meditar o hacer cosas que nos llenen el alma como: escuchar o tocar música, pintar, una buena lectura, mirar un atardecer, un buen baño de inmersión con sales o algo tan simple como un abrazo largo y sentido. Todo esto nos nutre de
energía vital.
Una persona bien nutrida:
• Consume alimentos llenos de nutrientes provenientes de los cuatro grupos básicos;
• No abusa de alimentos llenos de toxinas o estimulantes, como la cafeína, las bebidas alcohólicas, los azúcares y harinas refinadas;
• Descansa bien, duerme entre 6 y 8 horas diarias;
• Se siente Responsable de su vida y por ende con Poder para cambiar lo que no la hace feliz;
• Mueve su cuerpo, lo mantiene activo y realiza ejercicio físico;
• Pasa algunos minutos diarios al aire libre, en contacto con la luz solar
y la naturaleza, elevando la serotonina (hormona de la felicidad);
• Sabe escuchar a su cuerpo, que le avisa si está bien, (relajado, distendido), o si está mal (contraído o estresado);
• Se rodea de personas positivas y evita las dañinas;
• Cuida sus palabras y pensamientos, sabiendo que pensar en cosas tristes o negativas debilita el sistema inmunológico;
• Cuida lo que entra en su mente: las noticias, la música, y la lectura.
Éstas cosas son importantes, ya que las sembras en tu mente y lo que sembras, es lo que florecerá. Flores o yuyos.
Nos nutrimos, no sólo con comida, sino también con diversión, alegría, placer y amor.